En el este de Tijuana, vecinos de la calle La Esperanza viven desesperados por el mal estado de sus vialidades, las cuales presentan baches y ausencia de carpeta asfáltica desde hace más de dos años. Esta vía conecta con el Boulevard Díaz Ordaz, una arteria crucial, y su deterioro ha provocado decenas de accidentes viales. Ante la falta de atención oficial, residentes han optado por reparar los baches por cuenta propia, usando tierra, grava y piedras para prevenir más incidentes. La responsabilidad recae en la Dirección de Obras e Infraestructura Urbana Municipal, que aún no ofrece una solución.












