Para hacer que las cosas se den, no basta con pensarlas, hay que arrastrar el lápiz

Mi lápiz generalmente es paciente y aguanta mis dientes, a veces en el borrador, otras en la parte de metal y, casi siempre en la madera cuando mastico una idea

Jorge Valdivia
Noticias
Columna de Jorge Valdivia 5 de junio de 2024

Soy de los que les gusta usar un lápiz para escribir notas y sobre todo para dibujar. Plantear ideas sobre una hoja de papel donde el grafito va haciendo camino al trazar, es una sensación liberadora que de repente puede parecer un deporte extremo, al menos esa sensación me da a veces cuando ese “aparato de escribir portátil “ me permite hacer o al menos intentar, los trucos o suertes como las que se realizan en un skateboard o en el campo de fútbol cuando se van descubriendo los caminos hacia el anhelado gol.

Mi lápiz generalmente es paciente y aguanta mis dientes, a veces en el borrador, otras en la parte de metal y, casi siempre en la madera cuando mastico una idea. Así, pensando en qué escribir, jugando con mi lápiz y anotando temas en mi libreta, viendo cómo la mina se estaba quedando chata, surgió la necesidad de hablar sobre este cotidiano y mágico cilindro que sigue sorprendiéndome (así como al hermanito de Mafalda) por todo lo que puede salir de él.

Para hacer que las cosas se den, no basta con pensarlas, hay que arrastrar el lápiz. Una y otra vez, sin miedo al borrador, incluso a volver a empezar, a afilar cuantas veces sea necesario la punta, que la humildad de este simple, verátil y hermoso objeto es tan grande, que entre más hace, más pequeño se muestra.

Instrumento de artistas, de científicos y matemáticos, de artesanos y carpinteros, de caricaturistas, ilustradores y escritores de historias, de recetas, de quien hacen cuentos y de quienes realizan cuentas.

Tan importante para quien enseña como para quien aprende, desde cómo agarrar el lápiz y empezar a representar el mundo, sus pensamientos y sentimientos a través de ese carboncillo envuelto en un trozo de madera tan esencial para el desarrollo de la humanidad.

Con los avances tecnológicos y en la era digital, parecía que todo iba a ser accionado usando sólo nuestros dedos, pero el lápiz se impone también en su versión digital, con su diseño original para seguir siendo una extensión de nosotros mismos. Al hablar de mi lápiz, pareciera que los muchos que me han acompañado fuera uno solo infinito. Vaya si tenemos recuerdos, mi lápiz y yo.

¡No te pierdas nuestro contenido, sigue a TV Azteca Baja California en Google News!
DISFRUTA LA SEÑAL DE TV AZTECA
Contenido relacionado
×