En un claro delineamiento del nuevo mapa político de las Américas, Marco Rubio declaró: “Se acabaron los matices”. Ahora, los países se dividen entre aquellos que defienden la libertad y la justicia y las narco-dictaduras que desafían esos principios. Con México bajo observación, Estados Unidos se ha comprometido a reforzar su posición frente a naciones como Cuba, Venezuela y Nicaragua. La advertencia está hecha: es el momento de decidir entre la cooperación o el aislamiento.