Diversos proyectos impulsados con recursos públicos, como el Tren Maya, el AIFA, Mexicana de Aviación, Gas del Bienestar y la Farmaciota, comparten una constante: altas inversiones y beneficios limitados para la ciudadanía. Especialistas y cifras oficiales advierten que los retornos económicos y sociales no cumplen con las expectativas iniciales. Mientras el gasto continúa, los resultados plantean dudas sobre la planeación, la viabilidad y el impacto real en la vida diaria de los mexicanos.