PAWHUSKA, Oklahoma. — El pastor Robert Morris, fundador de la reconocida Iglesia Gateway en Texas, se declaró culpable de haber abusado sexualmente de una niña en la década de 1980. La confesión marca una caída estrepitosa para quien fuera uno de los líderes religiosos más influyentes de Estados Unidos.
Pastor se declaró culpable pero recibe una condena menor
Morris, de 64 años, admitió cinco delitos graves de actos lascivos o indecentes con una menor. Según el acuerdo judicial, fue condenado a diez años de prisión, aunque solo cumplirá seis meses en la cárcel del condado de Osage. Además, deberá registrarse como delincuente sexual y pagar $250 mil dólares en restitución.
Durante la audiencia, Cindy Clemishire, la víctima, lo enfrentó después de más de cuatro décadas de silencio, describiendo el abuso que sufrió desde los 12 años. “No existe el consentimiento de una niña de 12 años”, le dijo entre lágrimas.
El caso ha sacudido al mundo religioso estadounidense, pues Morris fundó en el año 2000 la Iglesia Gateway en Southlake, Texas, convirtiéndola en una mega iglesia con decenas de miles de fieles y gran influencia mediática. También fue asesor espiritual de importantes figuras.
Tras la denuncia pública en 2024, Gateway aceptó su renuncia y posteriormente destituyó a cuatro ancianos por encubrir las acusaciones. La Fiscalía de Oklahoma logró reabrir el caso gracias a una ley que suspende la prescripción penal si el acusado deja el estado.
Clemishire afirmó que la declaración de culpabilidad representa un “nuevo comienzo” después de décadas de trauma y silencio. Su valentía ha inspirado a otras víctimas a denunciar abusos cometidos por líderes religiosos en todo el país.
Rentas en Tijuana bajan 15% en 2025, pero jóvenes aún enfrentan retos para independizarse













