La situación bajo la administración de la Gobernadora Marina del Pilar Avila Olmeda se encuentra en estado crítico, pues se señaló que el Instituto Nacional de Migración (INM) en Baja California está presuntamente involucrado en el tráfico de personas.
El pasado 29 de febrero, agentes de la Policía Federal Ministerial catearon un domicilio en la Privada Alicante en la Colonia Santa Fe, donde señalaban que había traficantes de personas, sin embargo, al entrar a la vivienda descubrieron que el líder de la organización era presuntamente Antonio Camacho Solano, funcionario encargado del INM y su esposa María Isabel Paredes; le cobraban dinero a los migrantes.
La Gobernadora de Baja California afirmó que Tijuana es una ciudad migrante, sin embargo, queda en evidencia que podría existir una red bien organizada de tráfico de personas, donde probablemente funcionarios importantes estén involucrados
