El proyecto fue llamado The Line, una ciudad futurista que será diseñada por la empresa NEOM, la cual es propiedad del heredero de Arabia Saudita. El objetivo de este proyecto, es crear una ciudad que sea completamente inteligente y eficiente.
El presupuesto inicial para la ciudad es de 500.000 millones de dólares y la idea es que para el 2030, The Line sea una realidad, pero antes deben contar con la financiación, es por eso que se hizo el anuncio internacional, para atraer fondos.
Características de The Line, la ciudad futurista
La ciudad funcionará en su totalidad con energía renovable, con sistemas de agua 100% eficientes. No podrán entrar autos de combustión, pues contará con transporte público eficiente, en el cual se pueda recorrer la ciudad en 20 minutos.
Estará diseñada para que los habitantes puedan obtener todo lo que necesitan a 5 minutos, también se tiene pensado que la ciudad mantenga un aspecto muy estético, por lo que las líneas de transporte y las vías, estarán situadas bajo tierra.
Todo lo que ocurra en The Line, será gestionado por un sistema de robótica e inteligencia artificial, habrá servicios de suscripción para que cuentes con servicio de desayuno, comida y cena permanente.
La ciudad será construida de manera vertical, medirá alrededor de 200 metros de ancho y 170 kilómetros de largo y su altura será similar a la de los edificios más altos del mundo.
De esta manera, la población podrá acudir a cualquier lugar, ya sea la escuela, trabajo, parques, etc. estará a tan solo unos metros del suelo hacia arriba.
Se espera que tenga una capacidad para 9 millones de habitantes y que en su mayoría todos serán personas sumamente ricas.
También afirman que contarán con un sistema de refrigeración permanente y renovable, para que se tenga una climatización perfecta dentro del lugar, aún estando en el “exterior”.
Si aún no te ha sorprendido todo esto, se espera que The Line esté cubierta por millones de espejos, los cuales serán visibles solo en el exterior, pues en el interior se perderán en el entorno.
Aunque todo esto suena como la ciudad futurista perfecta, aún hay muchos aspectos que preocupan, pues será construida en una zona donde siempre hace calor y las temperaturas superan los 45 grados centígrados.
Además, no será algo muy apto para las personas que estén por fuera debido al reflejo del sol y también será peligroso para los animales, quienes también se verán afectados por el efecto óptico.
