Actualmente en México hay varios estados en donde apenas y se deja ver el sol debido a la intensa neblina, es por eso que decidimos recordar la historia de la gran niebla tóxica de Londres, la cual incluso causó ceguera y toxicidad en la ciudad.
Fue en diciembre de 1952, cuando comenzó el desastre, pues cuando los ciudadanos de Londres salieron de sus casas, se dieron cuenta de que estaban cubiertos por una densa neblina.
El aire estaba negro y de un momento a otro, ya no se podía ver absolutamente nada, las personas no sabían ni por donde caminaban y nadie decía nada, las personas recuerdan que había un enorme silencio.
Expertos aseguran que la densa niebla era una mezcla de humo, smog y el fenómeno natural de la niebla, por lo que la combinación de todo esto resultó en una niebla tóxica.
¿Cómo se volvió tóxica la niebla?
Desde que fue la Primera Guerra Mundial y terminó la Segunda Guerra Mundial, Londres había estado experimentando un problema de contaminación y a esto se me suma que Gran Bretaña comenzó con su gran producción de carbón.
Las personas utilizaban el carbón para calentar sus hogares, sobre todo durante la época invernal, cuando las temperaturas en Londres eran grados bajo cero, por lo que todos los hogares utilizaban sus chimeneas.
Por lo que en diciembre de 1952, en pleno invierno, todos los ciudadanos de Londres usaban sus chimeneas, por lo que ocurría lo de siempre, el humo del carbón subía al cielo y se disipaba.
Lo normal es que el humo se enfriaba en la atmósfera, pero en esta ocasión, estaba ocurriendo un anticiclón, el cual es un sistema meteorológico de altas presiones y lo que sucedió es que el aire cálido y húmedo quedó estancado en Londres.
El humo fue empujado hacia el suelo y por las bajas temperaturas, se condensó el vapor del agua y se convirtió en niebla, así que el humo del carbón se transformó en una densa y negra neblina.
Pero eso no fue todo, pues la niebla tenía 200 metros de espesor y el frío continuaba, cada que bajaba la temperatura se emitían más toneladas de humo por los hogares y los humanos seguían emitiendo el dióxido de carbono, así que la neblina nunca se disipaba.
Además, a la hora de quemar el carbón se produce el dióxido de azufre, un gas que se quedaba atrapado en la atmósfera y que al mezclarse con las partículas del agua de la niebla, se convertía en ácido sulfúrico, por lo que en Londres había lluvia ácida.
Todo esto generó una emergencia sanitaria, pues no había visibilidad y nadie podía transitar por la ciudad, así que tuvieron que cerrar el sistema de transporte público.
Miles de personas fueron a parar al hospital, debido a que empezaron a presentar problemas respiratorios, pues era neblina tóxica para la salud, causando enfermedades respiratorias y una ceguera temporal, ya que nadie podía ver más allá de sus pies.
Así que si ves una neblina densa y negra, es probable que sea neblina con smog y que sea niebla tóxica.
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