Lo que parecía un día normal terminó convirtiéndose en una escena digna de una película de terror para una familia de la región de Kedah, en Malasia, cuando una adolescente de 15 años descubrió que una enorme pitón de 60 kilos se encontraba oculta en el techo del baño de su casa.
La joven notó un agujero inusual en la tablaroca y, acostumbrada a la presencia de reptiles en la zona, decidió alertar a su madre, Nor Hayati Muhammad Rajab. Con la ayuda de una cámara de celular, pudieron captar la imagen del reptil, lo que llevó a la madre a abandonar una reunión y regresar de inmediato a su vivienda.
Al llegar, Hayati observó que lo que parecía una tela con estampado bitik era en realidad la piel del gigantesco animal. De inmediato, pidió apoyo a los servicios de emergencia, quienes acudieron con equipo especializado para garantizar la seguridad de la familia y de los vecinos.
Gran parte del cuerpo de la pitón destruyó el techo
Durante la inspección, los elementos de la Fuerza de Defensa Civil de Malasia provocaron accidentalmente que parte del cuerpo de la serpiente cayera desde el techo, dejando a todos impactados por su tamaño descomunal. Con ganchos y herramientas especiales, lograron retirar al reptil, que cayó con un fuerte golpe antes de ser asegurado por los rescatistas.
Las autoridades informaron que la pitón, que probablemente ingresó a la casa debido a la cercanía de un pantano, fue trasladada a una zona natural lejos de la comunidad para evitar nuevos incidentes.
“¡Pensé que era una anaconda!”, relató la madre, aún sorprendida. Además, aseguró que es la primera vez que un animal de ese tamaño invade su hogar y sospecha que pudo haber entrado por un árbol de guanábana cercano al techo del baño.
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