Condenan a “secretaria del mal”, dejó que presos se comieran entre sí

La mundialmente conocida como la “secretaria del mal” fue sentenciada por un tribunal alemán tras ser acusada por el presunto asesinato de más de 10 mil personas que murieron en un campo de concentración nazi.

Irmgard Furchner, hoy de 97 años de edad, trabajaba como mecanógrafa en el campo de concentración de Stutthof, en la Polonia ocupada por Alemania durante la Segunda Guerra Mundial .

Los crímenes de guerra y torturas fueron cometidos desde junio de 1943 hasta abril de 1945 cuando ella era una adolescente y fungía como la secretaria para el comandante del sitio.

Los abogados de la mujer señalaron que Furchner sólo era una empleada civil, pero el juez alegó que sí estaba al tanto de la masacre al interior de los campos nazis.

Las autoridades indicaron que la “secretaria del mal” sabía de las situaciones inhumanas que propiciaron que los mismos prisioneros se comieran entre sí para poder sobrevivir como en el campo de concentración en Stutthof en la ciudad polaca de Gdansk.

De acuerdo con registros históricos, el personal que conformaba al “Schutzstaffel”, abreviada como las SS, fueron los principales autores de la violencia en los campos de concentración nazi.

Por tanto, los demás funcionarios de la organización al servicio de Adolf Hitler que laboraban en el lugar no quedaron exentos de participación, como fue el caso de Irmgard Furchner.

En las últimas fotografías que se difundieron en medios europeos, la mujer acusada aparece sentada en silla de ruedas cuando se le dictó el veredicto. Sin embargo, su rostro fue difuminado.

Aunque no habló ante la corte alemana, la “secretaria del mal” rompió el silencio durante las últimas audiencias ocurridas en diciembre: su silencio: “Siento todo lo que sucedió”, declaró ante la instancia regional en la ciudad de Itzehoe.

Irmgard Furchner es una de las pocas mujeres que alcanzó a ser juzgada por crímenes nazi en décadas por lo que su juicio es uno de los últimos que se ha registrado sobre el Holocausto.

Cuando estaba por comenzar el proceso penal en septiembre del año pasado, Furchner intentó huir del asilo donde vive y se fue a una estación del metro, pero horas más tarde fue detenida en Hamburgo.

A más de 75 años, la sentencia que este martes emitió la Fiscalía representa un fallo sobre todo “simbólico” e “histórico” en la justicia por las víctimas del Holocausto.