Lo que parecía una emergencia médica terminó convirtiéndose en un milagro inesperado. Megan Isherwood, una mujer de 26 años, fue llevada de urgencia al hospital en Blackburn, Inglaterra, por un intenso dolor abdominal y vómitos con sangre. Los médicos sospechaban apendicitis, pero lo que ocurrió sorprendió a todos: dio a luz en una ambulancia sin haber mostrado signos de embarazo.
Dio a luz a pesar de haberse realizado un test que dio negativo días antes
El 9 de septiembre, Megan despertó con un dolor insoportable. Su amiga, alarmada, llamó a emergencias. Durante el traslado, los paramédicos notaron sangrado y decidieron hacer una ecografía: estaba embarazada y en labor de parto, pese a haber tenido un test negativo días antes.
En la ambulancia rumbo al hospital de Burnley, especializado en maternidad, una partera guió el parto. Minutos después nació Jaxson, con solo 33 semanas de gestación y 2,1 kilos de peso. El bebé dejó de respirar brevemente, pero fue reanimado exitosamente. Ambos fueron diagnosticados con sepsis, pero lograron recuperarse y fueron dados de alta el 25 de septiembre.
El caso de Megan es un ejemplo de embarazo críptico, una condición rara en la que la mujer no sabe que está embarazada hasta el parto. Hoy, Megan y Jaxson son conocidos en Blackburn como el “bebé milagro” que desafió toda lógica médica.
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