Con las condiciones económicas actuales, todo sube de precio, y los elementos esenciales para el Día de Muertos no son la excepción. Desde flores, velas y calaveritas, hasta alimentos para las ofrendas, mantener viva esta tradición se ha vuelto cada vez más costoso. Sin embargo, debido a la profunda raíz cultural de la festividad en México, muchas personas están dispuestas a pagar el precio para honrar a sus seres queridos.












