El phishing se ha convertido en el delito cibernético más frecuente en el mundo digital. Esta práctica fraudulenta consiste en engañar a los usuarios para que revelen información confidencial, como contraseñas, datos bancarios o números de tarjetas, mediante mensajes, correos electrónicos o sitios web falsos que imitan a entidades confiables.
Millones de casos de phishing se reportan diariamente
Alrededor de 3 mil 400 millones de correos electrónicos de phishing son enviados diariamente, de acuerdo con la empresa de ciberseguridad Deepstrike.
Y este método es tan efectivo que, según datos de organismos internacionales como INTERPOL y la Europol, representa la mayoría de los ataques de ingeniería social en línea. Las víctimas, al confiar en la apariencia legítima del mensaje, suelen hacer clic en enlaces o descargar archivos que permiten a los atacantes acceder a sus cuentas o sistemas.
A pesar de las campañas de concientización, el phishing sigue creciendo debido a su bajo costo de ejecución y su alta tasa de éxito, ahora también impulsado por la inteligencia artificial.
¿Cómo puedo evitar ser víctima del phishing?
Si bien el phishing es evitable la mayoría de las veces, nadie está exento de caer ante esta práctica. Entre las recomendaciones de expertos están:
Sospecha de correos inesperados
Si recibes un mensaje que solicita datos personales o urgencia para actuar, detente. No respondas ni hagas clic. Es mejor acudir directamente a la fuente oficial del supuesto emisor.
Verifica el remitente
Fíjate en la dirección de correo y analiza errores de ortografía, direcciones extrañas o dominios sospechosos, incluso si parece de una empresa legítima
No confíes en los enlaces
Coloca el cursor sobre cualquier vínculo para revisar la URL real. Evita hacer clic si no coincide con lo esperado. Es más seguro escribir la dirección en tu navegador manualmente
Activa autenticación de dos factores (2FA)
Esto añade una capa extra de protección. Incluso si tu contraseña es robada, el atacante necesitará acceso a tu otro método de verificación.
Usa contraseñas fuertes y únicas
Usa combinaciones robustas y distintas en cada cuenta. Considera usar un gestor de contraseñas para facilitar esta práctica
Mantén tu software actualizado
Las actualizaciones corrigen vulnerabilidades que los atacantes podrían aprovechar