Durante años, Sierra Cannon, una creadora de contenido de 26 años originaria de San Diego, soñó con tener pecas naturales. Probó desde henna y autobronceadores hasta maquillaje especializado, buscando el aspecto bronceado ideal. Pero en octubre de 2025, tomó una decisión que cambiaría su imagen por completo: tatuarse pecas permanentes en el rostro.
Después de gastar en productos temporales decidió hacer un cambio permanente
“Siempre sentí que mi cara estaba destinada a tener pecas”, confesó Cannon a PEOPLE. Luego de encontrar a un tatuador con precios entre 185 y 350 dólares, decidió hacerlo sin pensarlo demasiado. “Después de gastar tanto en productos temporales, valía la pena hacerlo de forma permanente”, añadió.
El procedimiento, según explicó, se sintió “como un gato lamiéndome la cara agresivamente”. Los primeros días, su piel lucía enrojecida y las pecas parecían dibujadas con marcador, pero tras una semana comenzaron a verse naturales.
@sierracannon So I got tattoo freckles hehe😯🫣 excited to share the process!! Done by the lovely @Blushingwithalo 🤍 #fakefreckles #CapCut ♬ original sound - sierra cannon
La reacción en redes sociales fue inesperada
Sin embargo, cuando compartió su experiencia en redes sociales, las reacciones fueron divididas. Algunos usuarios la felicitaron por su autenticidad, mientras que otros la criticaron duramente, afirmando que se había “arruinado la cara”.
“Las redes sociales son así, hay que tener la piel dura… y ahora la mía tiene unas pecas monísimas”, respondió Cannon con humor.
Una semana después, muchos críticos cambiaron de opinión al ver los resultados finales, que lucían naturales y favorecedores. Incluso personas con pecas naturales comentaron la ironía de que ahora otros busquen tatuárselas.
Para Cannon, las pecas tatuadas representan autoexpresión y libertad. “La gente siempre opinará, pero lo importante es ser feliz con uno mismo”, concluyó.
Asesinan al alcalde de Uruapan durante festejos del Día de Muertos
