¿Plásticos que causan cáncer? En la actualidad, la contaminación por plásticos representa una crisis ambiental y de salud pública a nivel global. De acuerdo con fuentes como el Foro Económico Mundial y reportes recientes, cada minuto se vierte en los océanos el equivalente a un camión de basura lleno de plásticos, afectando no sólo al medio ambiente sino también la salud humana. Según estima la Universidad de Newcastle (Australia), una persona podría estar ingiriendo el equivalente a una tarjeta de crédito de plástico cada semana.
La profesora Mariana Segovia Mendoza, del Departamento de Farmacología de la UNAM, ha dirigido investigaciones que vinculan compuestos plásticos como el BPA y el BPS con riesgo de cáncer de mama, especialmente en tipos agresivos de la enfermedad. Su trabajo evidencia cómo estos disruptores endocrinos interfieren con el sistema hormonal y pueden estimular tanto la proliferación como la metástasis celular.
¿Cómo actúan los disruptores endocrinos del plástico sobre el cáncer de mama?
Según la UNAM, los compuestos presentes en muchos plásticos —como el bisfenol A (BPA) y su análogo BPS— actúan como disruptores endocrinos del plástico, alterando el funcionamiento hormonal natural. El BPA imita al estrógeno, estimulando receptores dentro del núcleo celular, mientras que el BPS activa los receptores de membrana, provocando crecimiento celular incluso en líneas que no respondían previamente, como las células de cáncer triple negativo.
Estudio UNAM sobre niveles en sangre y correlación con cáncer de mama
Un estudio piloto de la UNAM halló presencia significativa de ftalatos y bisfenoles en suero sanguíneo de pacientes con cáncer de mama, especialmente en aquellos con formas más agresivas, en comparación con personas sanas. En cáncer en etapa IV, se detectó correlación con elevados niveles de dibutil‑hexil‑ftalato, mientras que los bisfenoles mostraron variaciones menos marcadas.
¿Qué revelaron los estudios celulares sobre BPA y BPS en líneas cancerosas?
En investigaciones realizadas por Segovia Mendoza, se expuso células MCF7 (luminales, de receptores hormonales) al BPA y BPS, observándose un crecimiento similar al causado por estrógeno natural. En células triple negativas, aunque no crecieron notablemente, sí se activaron receptores y se modificaron proteínas clave, como el VEGF, implicado en la angiogénesis y la metástasis.
Estudios internacionales confirman presencia en tejido mamario
Este año, investigadores en China detectaron directamente bisfenol A y otros disruptores endocrinos en el tejido mamario humano. Estos químicos no sólo estimulan la proliferación celular, sino que promueven la acumulación de grasa y la inflamación, creando un ambiente propicio para el desarrollo del cáncer de mama.
Además, un estudio global identificó casi 200 sustancias en envases plásticos vinculadas al cáncer de mama, muchas de las cuales son disruptores hormonales capaces de dañar el ADN.
Recomendaciones para reducir la exposición a estos químicos
La doctora Segovia Mendoza aconseja evitar calentar alimentos en recipientes plásticos o de unicel, pues el calor altera el pH del plástico, liberando contaminantes que se mezclan con la comida. También aconseja no dejar biberones, cosméticos o juguetes plásticos al sol o en el auto, ya que la radiación UV favorece la liberación de aditivos tóxicos.
Se recomienda preferir envases de vidrio o cerámica, reducir el uso de productos ultraprocesados en envases plásticos, y presionar por normativas públicas que regulen la producción, uso y disposición de plásticos de un solo uso.
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